Martes 22 de Septiembre del 2009:

Hoy:
- Subida al cerro Aguirre (por la mañana)
- Puente Tibetano/ Cable Carril (por la tarde)
- Juego Nocturno
- Constelaciones & estrellas (después de la cena)

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A la mañana me desperté a las 8 para bañarme. Desayunamos y a eso de las 10 salimos para el cerro Aguirre. Subimos a pie casi 400 mts. y desde lo más alto de podia ver gran parte de lo que es la ciudad de Tandil. Estaba bastante numblado y hacia frio, el viento me molestaba mucho y me daba de frente. Pero como digo yo : al mal tiempo, buena cara.

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Las estrellas & las constelaciones. Es increible observar las estrellas por la noche. Ver pasar estrellas fugaces desde tan lejos en alguna parte del universo, y tener la ilusión de que se cumplan tus deseos. Hoy es mi segundo día en Tandil y no extraño mi casa. Miro al cielo fijo y se me pasan miles de millones de sensaciones y sentimientos. Me sumo en el silencio por un minuto, y vuelvo a mirar a las estrellas. Me falta algo y no sé que, es como si volviera la sensación de sentirme incompleta. Y no voy a permitar que nada me arruine el viaje. Estoy cómoda donde estoy, y como restoy; y bastante relajada para ser yo. Me mantengo escribiendo en un cuaderno para después poder subirlo al blog. Necesito dejar grabadas en un papel (o en una computadora) cada una de mis vivencias. Creo que directamente sin hoja y sin papel yo no podría vivir. Y aunque suene estúpido, es así.

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Son las 11:35 de la noche y tuve un día bastante largo. Estoy cansada y hoy no tengo muchas ganas de quedarme hablando toda la noche con las chicas. Sin embargo, aunque este cansada, no tengo ganas de dormir. Estoy bastante cambiante hoy y todo esto de Andrés (¡Andate ya hijo de put@!) me tiene de muy malhumor y altera mis sentidos. Me asusta quedarme dormida y soñar con la persona que puedo ver llegar en sueños, me encantaría verlo y tejer hermosas cosas en mi imaginación, pero no, por otro lado no quiero. No quiero más rastros tuyos en ni en mi cabeza, ni en mi corazón. Me haces mal, y ahora que puedo pensar tranquila, lo entiendo, y está todo más que claro. ¿Por qué arruinaste las cosas así? Ahora necesito un abrazo de los tuyos y no lo puedo sacar de mi bolsillo. No puedo darle cuerda atrás a mi reloj. No puede mejorar la situación, porque eso ya no depende de mi; depende de vos, y vos todavía ni siquiera saber quien sos. Y gracias por ayudarme a olvidar. Ya no hay cuentas que saldar, creo que quedamos a mano. Y me pregunto dónde estaras, cuando, que haras, a que hora, y con quien. Y mientras más me cuestiono menos se. ¿Hasta Tandil me ibas a seguir? Ojalá no arruines esto también. Ojalá mi memoria te envié a la papelera de reciclaje, yo rersevé ahí un lugar para VOS. Mis ojos no aguantan. Me voy a dormir, y a tratar de no pensar ni en él, ni en los recuerdos de los dos en mi cama. Y esperar tal vez, en sueños al menos, verte llegar.